Martes 18 de marzo del 2025
La economía peruana mantuvo su dinamismo en enero tras crecer 4.1% según el boletín de producción publicado por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). El aumento se dio gracias al buen desempeño del componente primario del PBI, el cual registró un aumento de 4.4% en el primer mes del año.
La mejora del PBI no primario se debe al desempeño de la pesca y su influencia en el componente primario de la manufactura. En enero, el PBI de pesca aumentó 23.5% mientras que el de manufactura lo hizo en 5.5% gracias a un aumento de 17% de la actividad fabril primaria; la cual se encarga de elaboración y conservación del pescado además de otras actividades como la refinación de petróleo o la elaboración de carne.
La mejora también se dio por el buen desempeño de sectores no primarios. El sector de transporte, almacenamiento, correo y mensajería creció 7.8%; la construcción, 4% y el comercio 3%. Así, el buen desempeño de estas actividades fueron las que más aportaron al crecimiento de enero por debajo del aumento de las importaciones.
En cuanto a otros sectores primarios como la minería, ésta creció 3.2% en enero gracias a la recuperación de la explotación de cobre; la cual registró un aumento de 7.2% en el primer mes del año. El buen desempeño del cobre fue contrarrestado por el mal resultado del oro y zinc, cuyos niveles de producción cayeron 16% y 12%, respectivamente. Cabe resaltar que los tres metales explican el 65% del resultado del PBI minero.
El sector agrícola mantuvo su crecimiento en enero. Según el reporte del INEI, el PBI agropecuario creció 3.2% por un aumento similar de ambos subsectores: el agrícola y pecuario. La mejora del sector agropecuario se dio por el mayor aumento de la siembra de mango, uva, papa y caña de azúcar.
El crecimiento del PBI de enero confirma algunas proyecciones que el PBI crecería por encima del 3.5% en el primer trimestre de este año. Para febrero, se puede esperar un menor dinamismo por la menor cantidad de días trabajados, mientras que las proyecciones anuales estiman un crecimiento de 2.5% en un escenario pesimista hasta 4% en el optimista.