Lunes 11 de diciembre del 2023
El 9 de diciembre es el Día Internacional contra la Corrupción, una fecha especial para reflexionar sobre las consecuencias que genera la corrupción en nuestro país. Según la Contraloría, la corrupción genera un perjuicio de S/24,000 millones, además de crear un sistema de desconfianza que obstaculiza nuestro desarrollo como sociedad.
Sin embargo, la fecha también es una oportunidad para generar consciencia del papel que las empresas y personas pueden cumplir para construir una sociedad más integra. En ese sentido, existen herramientas de gestión que contribuyen a este objetivo, impulsando la transparencia y generando un entorno de confianza. Una de esas herramientas es la certificación ISO 37001. «Es el estándar internacional que define los requisitos para establecer, implementar, mantener, revisar y mejorar un sistema de gestión antisoborno», explicó Julio Ubarnes, certification manager de SGS Perú.
A continuación, las principales características de la certificación.
A quiénes se dirige. Aplica a todas las organizaciones independientemente del tamaño, sector, naturaleza o su nivel de exposición al riesgo, que quieran mejorar su sistema de compliance penal y dar una respuesta sólida y fiable a lo establecido en la legislación nacional. Dentro de las organizaciones, requiere dar un mayor involucramiento en las áreas comerciales y de licitaciones, finanzas, compras y logística, y legal.
En qué consiste: este estándar propone un conjunto de medidas proactivas con el objetivo de implementar un sistema de gestión antisoborno, a fin de que la organización pueda analizar las necesidades y expectativas de los grupos de interés, realizar una evaluación de riesgos y establecer controles que mitiguen estos últimos. También incluye capacitaciones y la definición de indicadores en el marco de un proceso de mejora continua.
Beneficios: ayuda a construir o consolidar una cultura ética de prevención en la organización, lo que conlleva a que esta genere una relación de confianza con sus grupos de interés.
Por otro lado, la certificación mejora los procesos al evitar el incumplimiento legal y sus consecuencias penales y administrativas a través de una alerta temprana. Además, cumple un rol fundamental en el alineamiento de la empresa con las exigencias de la ley 30424, que regula la responsabilidad administrativa de las personas jurídicas en delitos de soborno; y registra y provee evidencias ante investigaciones y posibles situaciones de corrupción, lo que sirve como una prueba de que la organización trató de prevenir este tipo de eventos.
Ubarnes agrega que SGS Perú cuenta con la acreditación del Instituto Nacional de la Calidad (Inacal) para otorgar la certificación antisoborno ISO 37001. “De esta manera, Inacal avala que hemos seguido los lineamientos que se requieren para realizar auditorías de la referida norma internacional y otorgar su acreditación como parte de nuestro certificado. Por lo tanto, nuestros clientes tendrían un doble sello”, comenta.
El ejecutivo remarcó la oportunidad que tienen las empresas para construir una sociedad más integra. «Las empresas pueden ejercer un liderazgo transformador que inspire a sus trabajadores, proveedores y otros grupos de interés», concluyó.