Miércoles 6 de septiembre
La Asociación de Buenos Empleadores (ABE) lanzó la convocatoria para la IX edición del Premio ABE a la Responsabilidad Social Laboral. En esta ocasión, AmCham Perú conversó con Juan Carlos García Vizcaino, gerente general del BanBif.
¿Qué implica ser una empresa responsable hoy?
Una empresa responsable implica serlo en todos los aspectos. Implica ser responsable de sus objetivos de negocios a través de una operación responsable dentro de una sociedad. Ello involucra tener una mirada integral interna y externa de la empresa para así poder generar un impacto positivo y disminuir los impactos negativos en el medio ambiente, la sociedad y economía. Va más allá de una actividad filantrópica, pues es parte de un compromiso de las operaciones con la sostenibilidad ambiental, las buenas prácticas de contratación y clima laboral, la ética y cumplimiento de los procesos en todo el negocio.
¿Qué aristas están involucradas?
Dentro de la estrategia que una empresa asume para ser socialmente responsable hay muchas aristas que involucran prácticas eco-amigables, voluntariados corporativos comprometidos con objetivos sociales que pueden estar alineados al negocio, adhesión a causas sociales, innovación para responder a problemas, etc. La responsabilidad social involucra todas esas acciones que unen esfuerzos para responder positivamente a una sociedad en la cual operamos.
¿Por qué es importante serlo?
Es crucial porque integra los resultados del negocio con el bienestar de la sociedad, la comunidad y el planeta. Al adoptar prácticas éticas y sostenible, las empresas contribuyen a mejorar problemas sociales y medioambientales, mejoran su reputación, atraen a empleados comprometidos y fomentan la innovación. Además, al hacerlo, se crea un impacto positivo que se extiende más allá de los beneficios financieros construyendo un mundo más sostenibles para todos.
¿Qué prácticas internas han aplicado?
Como parte de la responsabilidad social de BanBif venimos desarrollando prácticas alineadas a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en especial aquellos relacionados con nuestro core de negocio. En materia de educación, entendemos la importancia de acercar la educación y la inclusión financiera, por lo que trabajamos en la formación de finanzas personales para escolares, universitarios y la sociedad en general. Además mantenemos una alianza con la ONG Enseña Perú para llevar educación de calidad en el Instituto Educativo Fe y Alegría 44 en Quispicanchi.
¿Hay más iniciativas en esa línea?
En el mismo Quispincanchi, en línea con nuestra apuesta por el crecimiento económico del país y el fomento de la economía local y emprendimiento, trabajamos hace dos años con la organización SEMPA, con quienes mantenemos una alianza para empoderar a mujeres artesanas en temas relacionados a la venta y gestión de sus productos textiles. Ello con la finalidad de que logren una independencia económica e inclusión financiera.
¿Y con respecto a otras materias?
En cuanto a la materia de ambiente, fuimos el primer banco en apadrinar hectáreas en el amazonas. En alianza con la ONG Arbio, velamos por 30 hectáreas de bosque en el amazonas y contamos con un programa de reciclaje con finalidad social.
Por otro lado, el voluntariado corporativo y la participación en colectas internas ya es parte del ADN de nuestros colaboradores y nos permite que la educación, el crecimiento económico y medio ambiente sean un compromiso constante que es parte del día a día de la empresa.
¿Consideran que esas prácticas pueden ser aplicables a otras empresas?
Por supuesto, las acciones de responsabilidad social son aplicables a todas las empresas porque todas respondemos a necesidades del mercado y la sociedad. Hay acciones de responsabilidad vinculadas estrechamente con cada sector del mercado, lo que las hace viables y pertinentes para cualquier entorno.
¿Han intentado ayudar a sus proveedores a aplicar buenas prácticas?
Actualmente todo el trabajo con proveedores está dentro de nuestro Plan de Sostenibilidad que estamos empezando a implementar. En el plan consideramos los criterios ESG [Ambiente, Sociedad y Gobernanza] para además tomar criterios económicos para la selección y alianza con nuestros proveedores. Ello implica considerar factores como acciones responsables con el medio ambiente, ética, derechos humanos, entre otros.
Es un trabajo que busca ser sostenible en el tiempo, por lo que es una práctica que empieza dentro del banco para poder transmitirlo a nuestros proveedores y por qué no a nuestros demás aliados y stakeholders.