Las disrupciones climáticas han llevado a que el precio del cacao alcance un máximo histórico, situación que ha empezado a ser aprovechada por otros productores a nivel global incluyendo a los peruanos. Ello ha llevado a que las exportaciones del producto registren crecimientos de doble dígito en los últimos años.
En abril, el precio del cacao rozó los US$12,000 por tonelada; su máximo precio histórico según Investing.com (Ver gráfico), plataforma que mapea el precio de acciones y commodities. El aumento se debe a la menor producción de Costa de Marfil y Ghana —ambos representaron el 50% de las exportaciones totales del producto en el 2022, según el Observatorio de Complejidad Económica (OEC) — cuyos sembríos se vieron afectados por el impacto de sucesos climáticos agravados como tormentas u olas de calor fuera de la estación esperada.
Pese a que las exportaciones peruanas representaron solo el 2% del total en el 2022 según la OEC, la situación ha sido favorable para los envíos en el 2023. Según información de Adex Data Trade (ADT), las exportaciones de cacao crecieron 29% el año pasado, luego de haber registrado crecimientos de 9% y 10% en los últimos dos años. El resultado se dio pese a una caída de 3% en la producción de cacao durante el mismo año, según data del Banco Central de la Reserva del Perú (BCRP). (Ver gráfico)
La tendencia se ha mantenido al inicio de este año. Si bien en los dos primeros meses del año, la producción de cacao cayó 8%, las exportaciones al primer trimestre registraron un aumento de 18% en términos de volumen y un crecimiento de 83% en términos de valor. Así, en solo los primeros tres meses, el valor de las exportaciones ya ha llegado al 33% de los alcanzado en todo el 2023 y representa más del 50% de los valores registrados durante el 2019.
Los envíos a diversos mercados a nivel global también crecieron en el periodo. Al 2023, Estados Unidos destacó como nuestro principal mercado en términos de cacao al representar casi 20% del total. Al primer trimestre, la figura ha cambiado ligeramente y Malasia destaca como el principal destino al llegar al 16% del total (Ver gráfico).
En el primer trimestre, los envíos tanto a Estados Unidos y Malasia crecieron en 22% y 66%, respectivamente. Además, hubo otros destinos como Bélgica, donde el valor de las exportaciones se multiplicaron hasta 10 veces. Para países como Indonesia o Países bajos, el crecimiento de las exportaciones de cacao al primer trimestre fue de solo 61% y 25%, respectivamente.
¿Qué se puede esperar ahora?
La producción en Ghana y Costa de Marfil no se terminaría de normalizar en el corto plazo, lo que implicaría un aumento de los precios para el próximo año. Según un artículo de The Economist, los agricultores de dichos países le venden el cacao al Estado a un precio menor al internacional, lo que les impide realizar mayores inversiones para combatir las consecuencias climáticas.
Además, las regulaciones europeas para combatir el cambio climático también podrían jugar un papel fundamental en este mercado. Desde el próximo año, los productos provenientes de áreas con desforestación no podrán ingresas al mercado europeo, lo que podría generar mayores presiones al precio en el mediano plazo.
En dicho contexto, los productores latinoamericanos están empezando a realizar inversiones para aprovechar el buen momento del producto. Países como Ecuador y Brasil —ambos de los máximos productores a nivel global— buscan recuperar el liderazgo como mayores exportadores. Según la prestigiosa revista, Ecuador planea sembrar hasta 800,000 toneladas de cacao hacia el 2030; cifra 420,000 toneladas superior a la alcanzada en el 2023.
La situación actual se presenta como una gran oportunidad para los productores peruanos. Si bien las exportaciones de diversas empresas chocolateras han incrementado, los resultados podrían ser aún mejores si es que se logra producir más cacao para los próximos años.