Jueves 5 de diciembre del 2024
Los buenos resultados del PBI en el tercer trimestre —que registró un crecimiento de 3.8% según cifras del Banco Central de la Reserva del Perú (BCRP)— sumados al anuncio de una cuota para la segunda temporada de captura de anchoveta, llevaron a que BBVA Research ajuste el crecimiento para el Perú de 2.9% a 3.1% para el cierre de este año.
El crecimiento se moderaría en los próximos años según proyecciones del banco. En el 2025, el complicado contexto global por las políticas que implementará el gobierno de Donald Trump afectará el crecimiento global de la economía y de socios comerciales importantes para el Perú como China.
A nivel local, se terminaría de disipar el efecto positivo de los retiros previsionales de este año, lo cual le restaría dinamismo al consumo privado, uno de los principales motores de la economía. Sin embargo, la mejora de la confianza empresarial y condiciones financieras flexibles terminará por favorecer el comportamiento del gasto privado. Así, el banco estima un crecimiento económico de 2.7% para el próximo año.
Para el 2026, la incertidumbre generada por las elecciones presidenciales llevará a que el PBI registre un crecimiento de 2.7%. En adelante, BBVA Research estima un aumento promedio anual de 2.5%, el cual podría mejorar dada las diversas oportunidades que brinda el país, pero que se ven limitadas por una fuerte debilidad institucional.
En cuanto a otras variables como el tipo de cambio. El banco estima que el próximo año esté en un rango de 3.75 a 3.85, ello debido a que el diferencial de tasas de interés entre Perú y Estados Unidos será parecido al de este año, lo que mantiene una presión al alza. Recién en el 2026 veremos un diferencial de tasas favorable para el Perú, con lo que el tipo de cambia oscilaría entre 3.65 y 3.75.
Riesgos
El informe también detalla los riesgos a los que estará expuesta la economía peruana. En cuanto a externos, el menor crecimiento mundial por las políticas comerciales del nuevo gobierno de Estados Unidos es una de las principales. Se le suman otras como tasas de interés más altas o choques de oferta negativos por las condiciones geopolíticas o ambientales.
En cuanto a los riesgos locales, el escalamiento de la conflictividad política y social destaca como el más relevante. Por otro lado, la posibilidad que el gobierno caiga antes de las elecciones también supondría un escenario de mayor incertidumbre al actual. El informe también explica otros riesgos como un resultado electoral adverso a la economía de mercado o un aumento de la inseguridad por el crecimiento de la criminalidad.