Miércoles 28 de mayo del 2025
Los problemas empresariales más complejos en esencia se reducen al comportamiento humano. En realidad, la forma en que las personas se comportan influye fuertemente en cómo se diseñan los productos, servicios y procesos organizacionales y cómo estos captan la atención y preferencias de los interesados. Ahí es donde entran en juego los conocimientos sobre el comportamiento humano.
La práctica del análisis del comportamiento se centra en el uso de la ciencia y el conocimiento del comportamiento humano para decidir cómo resolver problemas y obtener los mejores resultados para clientes, empleados y ciudadanos. Hoy en día, muchas empresas se enfrentan a la disrupción causada por las tecnologías nuevas y emergentes. Si bien esta innovación es emocionante y está cambiando nuestra forma de trabajar, es solo una parte de la ecuación.
A medida que las amenazas y oportunidades emergentes transforman el panorama empresarial, las organizaciones que serán más exitosas son las que aprovechan el poder de la ciencia del comportamiento aplicada para comprender de manera estructurada y científica qué impulsa a sus clientes y empleados a pensar o actuar de la manera en que lo hacen.
A través de los conocimientos sobre el comportamiento (es decir, la ciencia del comportamiento aplicada), podemos ver cómo no siempre tomamos decisiones de manera racional y calculada. A menudo utilizamos procesos de pensamiento que son intuitivos y guiados por la intuición en lugar de deliberativos y planificados.
No se puede obligar a las personas a ser más racionales, pero al reconocer el poder de la personalización y anticipar los sesgos cognitivos utilizando la ciencia del comportamiento y el análisis de datos, se pueden diseñar intervenciones específicas y rentables que impulsen a las personas hacia mejores decisiones y comportamientos. Se trata de abordar las ineficiencias que se interponen entre usted y los mejores resultados para su organización y los interesados.
Según una investigación de Gallup, se muestra que las empresas que aplican principios de análisis del comportamiento superaron a sus pares en un 85% en crecimiento de ventas y más del 25% en margen bruto durante un período de un año. En este sentido, su personal y sus procesos son clave para el éxito de la transformación empresarial, pero a menudo se pasan por alto. El valor de comprender plenamente el comportamiento humano en toda su organización es fundamental para prepararla para el éxito.
Existen diversos campos en donde aplicar la ciencia del comportamiento. En educación, para mejorar la motivación y el aprendizaje de los estudiantes; en negocios y economía, ayudando a entender y predecir el comportamiento económico de las personas; en salud pública, para diseñar intervenciones que promuevan hábitos saludables y mejoren la salud de la población; entre muchas otras aplicaciones.
Sugerimos se tome un tiempo para conocer más sobre esta ciencia. En el futuro cercano, quienes realmente tomen la iniciativa de entender el comportamiento humano y vincular estos “insights” en sus procesos, organización y decisiones serán quienes tendrán una ventaja competitiva importante y sostenible.