Sala de prensa

¿Es correcta la regulación de la alimentación en el país?

Fecha: 2 de abril de 2018

Recién asumido el nuevo presidente de la República, se observó la autógrafa de Ley por la cual se establecía el etiquetado frontal de los alimentos industrializados, a través del mecanismo del semáforo. Esto implicaría que se volvería a exigir el etiquetado frontal con advertencias en forma de octágonos. Hoy se viene revisando por el Congreso de la República, poder del Estado que podría insistir en la promulgación de la ley con el esquema del semáforo o allanarse a las observaciones del Poder Ejecutivo, aceptando el etiquetado de advertencias con octágonos.

Los vaivenes regulatorios que se vienen produciendo como resultado de la Ley Nº 30021, de promoción de la alimentación saludable para niños, niñas y adolescentes, desde su dación el año 2013, ha generado descontento. Más allá del análisis que podría generar el debate planteado, este enfrentamiento de posiciones debiera llamarnos la atención de la forma en que se regula en Perú.

En primer lugar, debemos tener claro que en el Perú existe un fenómeno paradójico: mientras existe un cierto porcentaje de ciudadanos obsesos, simultáneamente existen muchísimas personas malnutridas o que pasan hambre. Resulta evidente que la concentración en un debate bélico sobre el sistema de etiquetado obligatorio frontal dista mucho de un enfoque holístico que pueda cubrir las necesidades de diferentes sectores de la sociedad peruana. Esta confrontación impide la implementación de un menú multifacético para resolver el problema de la obesidad en el país. Existen diferentes medidas (guías alimentarias, estrategias para promover la actividad física, educación alimentaria y nutricional, compras públicas de alimentos, entre otros) para tratar de reducir el sobrepeso de un sector de la población que no han sido siquiera abordadas en propuestas legislativas.

¿Se ha plasmado esta temática en una política nacional para evitar la desnutrición y la obesidad? ¿Se ha aprovechado el tiempo para realizar estudios científicos que soporten las razones para adoptar un determinado esquema de etiquetado nutricional? Los fuegos de artificios dialécticos han impedido este tipo de análisis esencial para desarrollar una regulación coherente en la materia. Más bien lo que ha primado ha sido un “copy-paste” de experiencias -muchas veces no comprobadas científicamente- de algunos países como Chile, Ecuador y Colombia, por ejemplo.

Este frenético ping-pong sobre el etiquetado de los alimentos también debería llevarnos a preguntarnos el por qué en el Perú se regula al estilo “parche”. Mientras hay países que tienen una regulación sistematizada sobre los alimentos, en el Perú estas normas están diseminadas en el Código del Consumidor, el Decreto Legislativo de Inocuidad Alimentaria, la Ley de Alimentación Saludable, por mencionar algunas de las múltiples existentes, lo que genera desorden, superposiciones y lagunas legales inoportunas. Sería ideal que las normas se sistematicen en un Código de Alimentos para facilitar la regulación y el cumplimiento de las mismas, tanto por parte de las autoridades, como de los empresarios del sector, teniendo en cuenta la deficiente base científica y sistémica para debatir la forma de regulación de la alimentación en el país.